Estoy contento conmigo mismo. Fui a comprar una cosa y logré traerme lo que quería a pesar de las tentaciones. En el momento de la decisión final, antes de gastar más de lo planeado, logré juntar fuerzas y salir a la vereda a pensar 10 minutos. Al final entré y compré lo que había ido a buscar. Un lindo stereo para el camión con una simple entradita auxiliar. Pagué menos de lo que había pensado y además me evité la sensación amarga que nos queda cuando nos venden sin dejarnos comprar.
4 comentarios:
¡Jajaja!
¡Te felicito! Ahora cuando viajemos a Cdba. en verano iremos con la murga a pleno: "Pero volviendo al tema horrible de los chinoooos!" jajaja!
A mi me pasa todo el tiempo Jo... con la diferencia que cuando voy a comprar ropa, me gusta todo! XD así que lo que me lleve, me encanta :P
Qué bueno, hicimos lo mismo cuando entramos a la juguetería a comprar el auto a radio control. A propósito, se merecería un post!
Tenés razón Marito. Me estaré volviendo un hombre práctico? oO
Te estarás volviendo un hombre?
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